El poema que leeréis a continuación se lo dediqué a la mujer que más quiero en este mundo, mi madre.
Se trata de una promesa que hice hace unos años y no sé por qué, casi no fui capaz de escribirla, ni siquiera de empezarla. Tal vez, porque me hacía la pregunta casi imposible de, ¿cómo le plasmo yo en un poema a mi madre lo que representa ella para mí?.
Creo que al final conseguí explicarlo mínimamente.
A TI,...MAMÁ
A ti,
Que te debo el estar dando guerra en este mundo
Y porque nadie me puede dar un amor tan profundo.
A ti,
Que de pezqueñín me diste de comer
Y con esfuerzo, ese chavalín, consiguió crecer.
A ti,
Que al llegar a casa me curabas las heridas
Cuando, llorando, venía con las rodillas doloridas.
A ti,
Que cuando los chavales querían pegarme
¡¿cuántas veces viniste a ayudarme!?.
A ti,
Que en tantas ocasiones me obligaste a estudiar
Y con tu ayuda y esfuerzo conseguía aprobar.
A ti,
Que tantas veces me cantaste en la cama
Hasta dormirme, un beso en la frente, y, ¡hasta mañana!.
A ti,
que me dabas los Domingos todas esas propinas
Con las que me compraba en el kiosko cromos y golosinas.
A ti,
Que cuando he necesitado consejo y opinión
Has estado a mi lado, apoyándome de todo corazón.
A ti,
Que más de una vez me diste algún capón
Por mentirte o protestar sin razón.
A ti,
Que con amor, cariño, dificultad y esfuerzo
Te digo lo que eres para mí escribiéndote estos versos.
A ti,
Que eres, para mí, la persona más querida,
Mi amor, mi alegría, mi mamá, mi todo, mi vida.
A ti,
Mamá,
A ti,
............
Suscribirse a:
Entradas (Atom)