lunes, 27 de diciembre de 2010

PIQUE CON SUERTE

La historia que viene ahora sucede entre tres pueblos de una comarca de León conocida como Tierra de Campos, en su estribación norte, casi enfilando la base de los Picos de Europa. Un grupo de muchachos llega en coche al pueblo leonés de Almanza un día de Agosto, allí se encuentran con un grupo de muchachas que está paseando con un rumbo que ellos desconocen.

El caso es que algunos se fijan en ellas y uno de ellos “se pica” con el que conduce el vehículo y le insinúa que no se atreve a seguirles. El conductor acepta el reto y ni corto ni perezoso dirige el coche hacia ellas, llegando al final a presentarse todos y entablar convensación.

El Verano les conduce a verse de nuevo en el cercano pueblecito de Valdavida, situado al sur del ya mencionado y en el posiblemente más famoso de los tres, por sus menciones en el Romancero español, Sahagún de Campos. En fin, el asunto es que surge al menos entre dos de estos jóvenes una amistad, en la que no faltan sus fallos y aciertos, sabores y sin sabores que comenzó, en mi opinión como bien dice el título de esta historia, con un:




PIQUE CON SUERTE




Guiado por el azar
En tu pueblo os vimos a mediados de Agosto.
Picao con un chaval
Hacia el río dirigí mi coche hasta vosotros.
Bendito sea el azar
Que en el leonés Sahagún, nos bendijo una noche
Y pudimos contemplar
La luna en tu pueblín sentados bajo la torre.
En el Valle de las
Casas, otra noche, observaba a La Frontera
Del “Límite del mal
Y el bien” que visité con aquella almanceña.
Te fuiste a fiar
En la verbena del cercano Valdavida
de un burdo mal pensar
que, en la plaza, me vio rondando a “unas queridas”.
Sin poder reaccionar
Por mi ignorancia, tú, cortabas el cabello
De nuestra amistad,
Que no salvó en tu peluquería ni un pelo.
Condenada a remar
En las galeras del destierro y el olvido,
Capeaba el temporal
A la deriva y al capricho del destino.
Pero logró avistar
El crecepelo de las reconciliaciones,
Yermo cuero a sembrar
Germinando sedoso vello y extensiones.
Ya vuelve a mostrar
en la pantalla mi móvil tu ansiado nombre,
¡Ay, no vuelva a traspasar
tu presencia el umbral del lejano horizonte!.

lunes, 8 de noviembre de 2010

EL CHEF DEL ENFOQUE


Tal y como anuncié en la última entrada el pasado Jueves 4 de Noviembre tuve el placer y el lujo de "enfrentarme" al gran público en el Victoria. Fue una noche en que, para no variar, se apoderaron de un servidor lo malditos nervios pero afortunadamente no impidieron que viviese o intentase vivir cada poema, cada verso como a mí me gusta.

Para mí, como digo fue un placer y un lujo.

Quiero ante todo dar mis más expresivas gracias a todos lo que estuvieron acompañándome, escuchándome y agradecer sus aplausos, sus ánimos, su atención y sus comentarios a posteriori, además de todas aquellas personas que si bien no pudieron asistir están ahí; vuestros ánimos y aplausos son impagables. ¡GRACIAS!

Esta vez os ofrezco el poema que llevó el título que se le puso al recital, cuyos versos van dedicados a una de las personas que yo creo más renombre tienen en Badajoz. Un pacense que no sé si decir que tiene arte con un objetivo en la mano o que “sencillamente” es un artista retratando.
Le conocí de camino a la escuela de idiomas, yo iba a toda prisa a matricularme y no llevaba fotos encima. Me encontré con su local y me sorprendieron el trato más que amable que tuvo conmigo y el interior de ese local que más que un estudio de fotos es un museo.
El caso es que años después, me lo presentó Mediterráneo y tras una amena y curiosa conversación, parte de mí ya se quedó dentro de ese museo que, casi en el “fondo de La Soledad”, tiene abierta su puerta al mundo…



EL CHEF DEL ENFOQUE




Casi en el "fondo de la Soledad",
en las entrañas del feudo pacense,
su postigo no pasa indiferente.
¡Qué curiosa contrariedad! ¿verdad?

Con su elegante naturalidad
y ese afable talante siempre al frente,
y se ponga de costado o de frente
encuadra a todo en la inmortalidad.

Habiendo de ser fotografía
su vida, su pasión y su estandarte,
con su tesón, arte y filosofía

Un buen estudio debía montarse,
pero en vez de "otro más" nacería
el genuino museo Vidarte.

miércoles, 13 de octubre de 2010

MOMENTOS DE GLORIA


El pasado día 24 de Septiembre tuvo lugar en en Hotel Zurbarán de Badajoz la presentación de la asociación cultural MIGAS.

En dicho evento recité un poema que dediqué a Juan Antonio Méndez del Soto (ex-coordinador de los recitales del Gran Café Victoria, también de Badajoz), en agradecimiento por haberme concedido unos MOMENTOS DE GLORIA en su agenda. Un poema que os ofrezco aquí y que se podrá volver a escuchar el próximo Jueves 4 de Noviembre en ese lugar tan entrañable para mí como es el Gran Café citado.



MOMENTOS DE GLORIA





Un empapado Lunes, veinticuatro de Noviembre,
piso por vez primera Extremadura, llegué a Badajoz.
Vengo sólo, con mi uniforme, sin conocer mi voz...,
corría el año mil novecientos noventa y siete.

Diez años después, casi rozando Noviembre,
el azar me llevó a ese Café donde mi voz,
sin comerlo ni beberlo, iba a sonar para vos
aquel bendito San Valentín del año siguiente.

Juan Antonio Méndez del Soto, en el Victoria,
me buscaste en tu agenda unos momentos de gloria
y, por sorpresa para mí, poeta se me llamaba.

Llegó el momento de mostrar al mundo mi poesía
y de ver emocionado que todos me aplaudían.
Gracias por Momentos Literarios, un cuento de hadas.

sábado, 18 de septiembre de 2010

EN UN FRÍO SÁBADO OTOÑAL

Después de un tiempo sin ofrecer nada nuevo me voy a arrancar con un relato de Febrero de 2007, que narra un fin de semana de Otoño en el norte cacereño, concretamente en Hervás, con un grupo de amigos. Comenzó en un Sábado por la noche cuyo cielo estaba entre que llovía o helaba. Casualidad o no, al día siguiente hizo un día primaveral y nos despertamos con la noticia de que comenzaba su andadura una pareja de novios que poco después acabaría felizmente en boda.

No sólo lo pasamos en grande en la naturaleza, el valle del Ambroz, sino que nos dimos una escapada a la estación de esquí La Covatilla, donde algunos conocieron la nieve y todos conocimos la citada estación. Para rematar la faena disfrutamos del paraje de El Castañar en la Ruta Heidi.

Fue, como digo, un inolvidable fin de semana que comenzó…






EN UN FRÍO SÁBADO OTOÑAL




Con roca y nieve en la tez,
como si de miel tratase,
Ambroz nos da de beber
el manjar de su paisaje.

Esa choza, ese poblado,...,
¡valle de serenidad!,
a estos chicos ha epatado
tanta majestuosidad.

En un frío Sábado otoñal
Al pie del puerto de Honduras,
Que con helada o con lluvia
Vestirá esta noche a Hervás,

Comienza un fin de semana
Al calor de la candela
Con una gustosa cena
Y el compás de una guitarra.

El día siguiente se ve
soleado y jubiloso.
Barrunta el amanecer
un suceso prodigioso.

Tras la velada que ayer
tuvimos en el salón
Y Cupido en su papel,
Hoy sois “mucho más que dos”.

En Béjar hago un inciso
Y al filo del mediodía
Unos ven la nieve en vivo
Y todos, La Covatilla.

La tarde es para enmarcar,
semeja un lienzo de El Greco
la Ruta Heidi, al pasear,
por ese hermoso lugar
que es el norte cacereño.

martes, 20 de julio de 2010

CUADERNA AL RIVERA

El poema que vais a leer a continuación se la dediqué en Noviembre de 2007 a la Peña Deportivista Filipe Luis de Coruña tras una derrota en casa contra el Rácing de Santander por 0-1.
Fue el primer partido del lateral izquierdo Filipe Luis como titular y a cuya persona se debe el nombre de la citada peña. Tuvo la mala fortuna de, además de perder, ser expulsado. Mi intención fue levantarles el ánimo y mandarles un besazo muy fuerte.




CUADERNA AL RIVERA




¡Arriba ese ánimo, recobrad vuestra alegría!.
Os deseo, Peña, en forma de Cuaderna vía
Que el Super Depor vuelva a tocar su melodía
Y Filipe no extinga su fútbol de poesía.

jueves, 8 de abril de 2010

EN UNA TARDE DE JUNIO

La historia que viene a continuación es una de esas que suceden por casualidad y según los acontecimientos que posteriormente tienen lugar le cambia a uno la vida.

En una tarde de Verano, en Junio, hace ya unos años un joven tenía que presentar una tesina para su carrera universitaria. Él manejaba bastante bien el ordenador pero no así la máquina de escribir. Le pregunta a unos conocidos si saben escribir a máquina, dándose la casualidad de que uno de ellos sí y además de disfrutar haciéndolo, era capaz de mantener una velocidad aceptable. Lo que no sabía este ayudante era lo que le esperaba en la aventura en la que estaba a punto de embarcarse.

Tras deliberar cual sería el mejor lugar para trabajar, este par de jóvenes, posteriormente amigos, se irían a compartir fatigas al trabajo del interesado, ¿¡un parque de bomberos!?.



EN UNA TARDE DE JUNIO




Aquella tarde nos preguntaste: -¿Sabéis mecanografía?-.
Apenas sí tardé en afirmarte que ayudarte podría.
Y al ver que esa letra indescifrable era capaz de leer,
¿Cómo iba yo a saber lo que me iba a suceder?.
Fuimos descartando lugares y horas para una ardua tarea
Hasta que se te “encendió la bombilla”
Y al unísono exclamamos: -¡Sea!-.
Íbamos a pasar un trabajo tú y yo a vuestra oficina,
De una Olivetti, tú y mis dedos saldría tu tesina.
Y aunque me agradecías que te ayudase en esa labor,
Viendo las circunstancias
Quien daba las gracias, al final, por ello era yo.
Sólo vi allí monos rojos y tardes de rosa…,
Lances azarosos del destino, ¡lo que son las cosas!.
Con instrucciones, máquina y folios, al final, fue un gimnasio
Testigo de una historia con personajes y hechos geniales.
Con la compañía reinante, ¿qué es eso del cansancio?,
Por ver delante a cierta mujer, trabajar la pena vale.
Tras ensañarme escribiendo me hacíais parar:
Para que trepase con todos vuestra cuerda vertical…,
…otros días quince goles en dos horitas fueron eternos,
Parecía que empezando en Verano se acababa en Invierno.
Sería imposible describir tanta andanza sin “darnos la uvas”,
Así que, resumiendo, con este poema quiero
Agradecer eternamente el haberme pedido ayuda,
En una tarde cualquiera de Junio,
A ese amigo y gran profesor
Y aun trabajo que de su cabeza salió.
Pues por ese “mensajero enviado del cielo”,
Dio comienzo una historia genial
Que sucedió en un parque de bomberos.

lunes, 1 de marzo de 2010

EL REGRESO DE UN FENÓMENO

¿Cuál es señoras y señores,
Mis queridos lectores,
el peor momento, con diferencia sobre todos los demás en la vida de un deportista?.
No es el mal juego, no es el frío, ni el calor, ni una relación buena o mala con el prójimo. Todos somos humanos.
El peor momento, que es el que más duele física y mentalmente es, sí: una lesión.
Pues bien, este es un grito de apoyo a un gran futbolista y por fuente más que fiable, gran persona, al cual le ha tocado padecer una lesión tan grave como para tenerle apartado de los terrenos de juego unos pocos meses.
Con la esperanza de ver corear su nombre en los estadios, con él corriendo por la banda, le va este grito de ánimo y apoyo.





EL REGRESO DE UN FENÓMENO






A ti, gran futbolista, ¡oh, Rei Filipe!:
No dejes que te invada la amargura.
Deseo que su alma sea fuerte y pura
Y este percance sea una simple gripe.

Que Riazor, pronto contigo flipe.
Vuelva rauda al lateral tu armadura,
Dé, a terco adversario, letal censura
Y gol que ningún portero disipe.

¡Arriba ese ánimo y esa alegría!.
Eres joven aún, fuerte y templado,
¡Volverá tu fútbol de poesía!.

Volver a competir está aquí al lado
Y sonará, otra vez, la melodía
Que al Súper Dépor siempre ha abanderado.